Maternidad Obrera Aimara Fernández

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Escribir, escribir, escribir, es lo que sé hacer para todo y ante todo, desde que tengo uso de razón. Aprendí a sobrevivir escribiendo y viceversa. Es esta mi extraña forma de vida, de pensar que

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En el salón de este hermoso hogar, escuché otra vez este sábado, como casi siempre en el fin de junio de los últimos años, el fado más bello. Para mí ya se hizo tradición que

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Qué tipo de proxémica sería hacer flor en el jardín de la noche? Con sus dedos, manos, bocas, cuerpos, construyendo un mundo juntos. Si la flor sangra en su boca se asusta. Una mujer prerrafaelita